7 de junio de 2007

Pura adicción

He de confesarlo, tras un año en Informática, me he vuelto adicto... al Linux. En principio me lo instalé para practicar Fundamentos, pero poco a poco me he ido instalando bobadas, y cada vez pasando más tiempo ahí que ya puede ir olvidándose el Windows de verme.


Últimamente sólo me metía en ese aborto de Sistema Operativo para jugar, pero desde que he descubierto la combinación de Wine con Cedega, creo que poco tiempo pasaré por ahí.

Aquí tenéis mi escritorio en Ubuntu

En principio opté por la distribución Ubuntu, y con la que más ganas lo cogí fue con la versión 7.04, que es la actual y más pulida. Lo hice porque es la que tiene los métodos de instalación y configuración más sencillos, muy visual e intuitiva; pero con la personalización y estabilidad característicos de Linux. Sin contar con que, al ser la distro más extendida, en cualquier lugar puedes encontrar soporte para ella, consejos, ayuda con problemas, etc. Y el Automatix, una aplicación que incluye scripts para instalar unos cuantos programas, códecs o ajustes del sistema. Eso sí, a la hora de instalar otras aplicaciones, Linux sigue siendo tan cerrado como siempre; pero si tenemos una distro basada en Debian (Ubuntu lo es) podemos usar su sistema de repositorios para, con un sólo comando, instalar aplicaciones mediante el sistema APT (ahí están la mayoría de los programas bajo licencia GPL, como el Automatix, el aMule -port a Linux del famoso eMule-, el Beryl -un gestor de escritorio 3D-, el aMSN, todo tipo de drivers, etc.)

Así que si queréis un sistema operativo que sea plenamente funcional, estable, de uso libre, personalizable y seguro, os recomiendo que lo probéis; eso sí, la pega es que necesita hacerse a él y aprender su funcionamiento y a manejar un mínimo de comandos en consola: ¡no todo iban a ser ventajas!

Página oficial de Ubuntu

No hay comentarios: