Sólo había una cosa que me cabreara más que me despertaran en verano sin tener que "madrugar": que me despertaran con una llamada de teléfono que -por supuesto- nadie coge.
Hasta hoy.
Hoy es el día en que añadimos una nueva etapa de mal despertar: que te llamen por teléfono cuando estás durmiendo en verano para que vayas a ver qué le pasa a un ordenador.
Hasta hoy.
Hoy es el día en que añadimos una nueva etapa de mal despertar: que te llamen por teléfono cuando estás durmiendo en verano para que vayas a ver qué le pasa a un ordenador.
2 comentarios:
al menos...arreglaste el ordenador?
Obviamente, ese mismo día no. Pero he de decir que acabé haciéndolo...
Publicar un comentario